domingo, 8 de febrero de 2015

La Araña y Diedro Gallego. Jornada 2

Jornada anterior: http://pelegrinajes.blogspot.com.es/2015/02/wild-gredos-ice-escaladas-varias.html

Fue una plácida noche de refugio. A las 7 estábamos desperezándonos en los sacos con todo en silencio.
Se tratan de momentos en los que "algo" te recorre por el cuerpo, la sangre comienza a fluir cargada de adrenalina y de ganas por comenzar.
Primera meada en la calle, el cielo está despejado y el circo está cubierto por completo de "verglace", hace mucho frío -15º marca el termómetro de la puerta.
Comienza el ajetreo de gente, mientras vamos desayunando y organizamos la mochila.
Nuestro objetivo es empalmar la escalada de la Araña de la parte baja del cuchillar con el Diedro Gallego de la parte superior y volver por la Portilla Bermeja al refugio. Eso sí, tenemos que estar a las 4 como muy tarde en el refugio ya que los guardas se marchan hacia Hoyos a esa hora.

Nos calzamos los crampones en la puerta del refugio, es lo último de los preparativos y somos los primeros en salir en dirección a la Hoya Antón situada en la base del Almanzor.
Hay algo de huella abierta, está es profunda pero nos valdrá perfectamente para ir progresando hacia el corazón del circo.
Levantamos la cabeza, está todo precioso el hielo cubre todas las paredes de los picos del circo y mención especial merecen los Tres Hermanitos por los que casi se podría escalar en hielo hasta cumbre.





La huella que llevamos parece dirigirse a favor de nuestros intereses y pronto podemos divisar nuestro itinerario perfecto de la jornada, podemos ver La Araña por completo y la fisura diagonal del Diedro Gallego unos cuantos metros más arriba. Hacia allá vamos.


Un poco más adelante la huella se dirige a la Hoya Antón, ahora tenemos que descender unos metros para volver a subir a la base de la cascada situada en frente. Esta zona esta helada por lo que ascendemos por una pala de 40º con bastante comodidad para acceder a la base de nuestra escalada.

Hemos elegido un pequeño espolón rocoso para montar la reunión de la base, tiene algunas fisuras un tanto estrechas y las anchas tienen hielo, así que limpiamos la zona y tiramos de clavos planos para el seguro.

foto visión de cascada desde abajo.

Esta vez Gayu está dispuesto a abrir su primera cascada, así que le cedemos los cacharros y confiamos en él. De hecho es el que más y mejor escala en roca de nosotros.

ESCALADA:
La Araña III/3, 120mts.


Esta cascada la componen dos largos de cuerda bien diferenciados. El primero se trata de una sucesión de resaltes a 65º/70º de unos 20 metros, con tenencia primero a izquierdas y luego a derechas, para continuar ascendiendo otros tantos metros por placas de hielo y llegar al nevero de 50º que nos lleva a la reunión formada por dos clavos. (ojo uno de ellos un tanto inestable).
El segundo largo es más corto a la vez que más explosivo, realmente el hielo cubre unos 15 metros de vía, pero en su mitad un resalte de unos 75º mantenido es la mayor dificultad. Posteriormente se sale a una pala de nieve donde en una roca está ubicada la 2ª reunión con párabolt.


Largo 1. Con la reunión montada inicia Gayu la escalada, se introduce por nieve blanda entre dos pequeños espolones y con tendencia a izquierdas va ascendiendo por resaltes de 65º, mete dos tornillos en los primeros 10 metros y decide descansar a tomar aire.
Está en el tramo más inclinado de 70º y continúa de nuevo hacia arriba a hora con tendencia a derechas, el hielo está mejor y va progresando parando a meter otro seguro y perdiéndolo nosotros de vista tras los primeros 20 metros.
Desde ese punto en otras ocasiones ya se inicia la nieve, pero está vez aún hay otros 20 metros de hielo, se trata de una placa de peor hielo para asegurar pero por la que se progresa muy bien (60º), sobre todo se hace muy dinámica y da respiro a los maltrechos gemelos. 
Sin protección sale de la placa y sólo le quedan otros 20 metros sobre nieve blanda para llegar a los clavos donde montar la reunión.
Pero tenemos un problema, le quedan 5 metros para llegar a la misma y no tenemos más cuerda. Ésto nos obliga a desmontar la reunión de abajo y progresar esos 5 metros en ensamble para llegar al hielo del inicio de la cascada. Menos mal que Gayu tarda 30´´ en montar la reunión para ir asegurándonos.

A top la escalada se ve de otra manera y te puedes dar el gustazo de controlar la fuerza de pegada, fiarte de  clavar lo mínimo y no gastar fuerzas extras en el golpeo. Sin muchos problemas llegamos a la primera de las reuniones.

Desde esta reunión nos separan unos 15 metros a la siguiente cascada, justo en su base hay otros dos clavos, por lo que caminamos por nieve blanda unos 10 metros para estar mejor situados para asegurar el segundo largo. Vamos bastante bien de tiempo para realizar todo lo propuesto y el termómetro marca -6ºC, algo bastante más acogedor que lo de esta mañana a primera hora.

Largo 2. Vamos con el segundo, decidimos repartirnos los largos e iniciará este segundo Juanjo para dejarme a mí el Diedro Gallego.

segundo largo
Con la rapidez que caracteriza a Juanjo pronto tiene el arnés repleto de cacharros, quizás demasiados, quizás no, seguro. 
Hace una travesía a izquierdas por nieve blanda con el fin de buscar el buen hielo para comenzar, y lo encuentra. Este tramo pronto se pone a 70º de inclinación, por lo que protege a las primeras de cambio con un tornillo, cuatro metros más arriba ya está en la parte más inclinada 75º donde mete un segundo tornillo y toma aire para continuar.
La cosa se pone aérea pero el hielo es perfecto, se clava muy bien, ni estalla, ni es plástico, lo justo para proteger y progresar en condiciones perfectas. Un par de metros más arriba la dificultad decrece y el hielo da paso a la nieve dura, por donde también se progresa bien, las rampas son 55º hasta llegar a la reunión en una pequeña roca donde existen dos párabolt con argolla a prueba de bombas.

Recupera cuerdas y vamos ascendiendo por la cascada hasta llegar a la misma reunión, son las 12, por delante 4 horas aún para poder llegar al refugio que calculamos que son las horas aproximadas que emplearemos en completar nuestra ascensión de una manera elegante.

llegando a la R.2
Tenemos en frente la Canal de los Diedros, por ella debemos subir al encuentro del diedro elegido y ascendemos por terreno helado de 30º con extremo cuidado. 
En poco tiempo llegamos a la entrada de la canal, la protegen dos contrafuertes rocosos que te invitan a pasar y adentrarte en "el otro mundo". Ahora la pendiente aumenta a 40º y la nieve blanda hace acto de aparición combinándose a la perfección con tramos de nieve dura.




El Diedro Gallego aparece pronto a la derecha, desde abajo se ve increíblemente precioso y apetecible. Esto es una maravilla a la vista de todo alpinista y escalador de corredores.

Diedro Gallego IV/3 M4, 50 mts.



Lo componen dos partes bien diferenciadas; una primera con un diedro perfecto de unos 35 metros en donde la nieve o hielo llega a espesores mínimos y forma una estrecha linea blanca. Y una segunda en mixto de unos 15 metros donde hay que buscarse las mañas para ganchear en la roca y los bloques para llegar a la parte alta de la cresta.

Nos situamos en la parte izquierda del corredor, no tardamos mucho en mortar la reunión, una amplia laja en la pared de la izquierda nos pide dos fisureros medianos que quedan perfectos.


Me dispongo a iniciar el largo, desde aquí abajo se ve precioso aunque algo escaso de materia blanca y yo no llevo los gemelos para "mucha fiesta".

Una corta rampa de nieve dura a 60º me deposita en la estrechez del diedro, veo que tiene buenos pies para descansar y cosillas para proteger en roca. Así que voy trabajando.


Primero meto un clavo plano en la izquierda y continúo a la vez que se pone más inclinado. Siguen apareciendo buenos pies a ambos lados del diedro, cosa que se agradece bastante para no cargar los gemelos.
Viene un pequeño resalte helado donde intento meter un tornillo, entra casi todo así que como seguro intermedio algo es algo y vuelvo a tirar para arriba.

Los escasos 50 centímetros de anchura de nieve dura, ahora están separados por una línea vertical de roca, por lo que con un pie por cada lado se superan los siguientes dos metros, el hielo y la nieve no es muy estable así que gancheo en alguna roca que me da más seguridad. Un clavo aparece a la izquierda, así que aseguro el final del diedro, para el que me quedan escasos 5 metros.


Hay algo más de nieve, por lo que progreso con más comodidad hasta salir del mismo donde veo la última parte de la escalada.
Se trata de una placa de algo más de 10 metros llena de nieve, está expuesta y una caída no sería muy buena, además de proteger una caída nada de nada. La única solución que veo es continuar por la fisura izquierda que se forma entre la pared y la placa y donde veo que hay algunas rocas y bloques empotrados.

Voy gancheando algunas rocas empotradas en la misma y voy limpiando con el piolet descubriendo algún pequeño escalón, los crampones más bien valen de poco, porque van chirriando entre las placas sin apoyos buenos.

Tras un par de metros veo una buena fisura y entra el omega verde a capón, ésto me da mas seguridad y continúo los dos metros que me separan de una línea helada que lleva a la cresta. Ahora sí, por la línea de nieve dura voy ascendiendo los últimos metros hasta llegar a divisar la vertiente opuesta.

Allí veo un gran puente de roca que me servirá de reunión perfecta y les doy el ok a mis compañeros que esperan impacientemente y helados. -6º marca el reloj.

Sube Gayu. Tras montar la reunión será el primero y va ascendiendo lentamente por el precioso diedro helado hacia mi posición.


Cuando llega a la parte final del diedro y antes de la placa, inicia Juanjo el ascenso paralelamente, así ganamos tiempo.

Llega Gayu a la reunión y Juanjo ya asoma por el final del diedro que da acceso a las placas.


Con rapidez estamos ya todos en la reunión, Juanjo también ha llegado y busco la cámara para hacerlos una foto de muchas que hecho este fin de semana, pero nada, no aparece.


¡¡buff!!, me miro y remiro en todos los bolsillos y no la tengo, ha debido de caer así que valoramos si seguir hacia cumbre en otro largo o rapelar el diedro.
Finalmente optamos por esta segunda opción y cabreado conmigo mismo por que ya son muchas cámaras las perdidas abandonamos una cinta y descendemos rapelando por el diedro.

Juanjo baja el primero, después yo y por último Gayu, Juanjo va descendiendo hacia los párabolt de la salida de la araña, mientras nosotros vamos guardando las cuerdas. En ese momento oigo a Juanjo que comenta que ha aparecido la cámara, ¡¡qué subidón!!.

Descendemos hasta los párabolt y mientras llego me comenta que no tiene la memoria ha debido de saltar por los aires, me entretengo en buscarla bajo los contrafuertes del diedro, pero no veo nada de nada.

Son ya las 14:30 por lo que no podemos perder más tiempo. De esta manera realizamos los dos rápeles de la araña y por el fondo del circo volvemos por nuestras huellas rumbo al Refugio de Élola.


Llegamos al refugio a las 15:30, nos están esperando y es que los guardas se van hacia abajo ya. Sacamos todo del refugio, echamos las cuentas y con la calidez que te da el sol y una cerveza arreglamos la mochila para la vuelta a la vez que comemos algo.

Sobre las 16:30 partimos del refugio, vamos delante de la sombra de los cuchillares y es que el sol de Febrero aún es escaso a pesar de que se agradece muy mucho.
Atravesamos la Laguna Grande de Gredos cubierta de nieve y vamos rumbo a los Barrerones.


Vamos cogiendo temperatura, la subida nos pone a tono y sentimos curiosidad por saber exactamente que coño hicimos durante la jornada anterior para perdernos tanto por los Barrerones.
Sin crampones ya que el itinerario esta superpisado y con hielo granulado llegamos a la parte alta de la vuelta.


El viento, que no habíamos visto en toda la jornada, sopla de Norte y el sol se esconde tras el circo, la temperatura cae en picado, nos abrigamos y ponemos de nuevo el gore tex, estamos a -1ºC y son las 17:30. Así que llegaremos con las últimas luces a la Plataforma.
Realizamos varias paradas, una para conocer de primera mano el rodeo que dimos de ascenso de la jornada anterior y otra para ponernos los crampones, ya que esta rehelando tras esconderse el sol.

Una de las cosas buenas que tiene la temporada invernal precisamente es el descenso al Prado de las Pozas, no hay zeteos en el itinerario y en poco tiempo llegamos al puente. Desde allí ya esta todo hecho, por lo tanto, filosofamos, adivinamos que hubiéramos hecho ayer si...., nos interesamos por las sensaciones de Gayu, valoramos lo sucedido últimamente en las redes, hablamos de cosas de padres y de comida......que es la siguiente motivación del día.

A las 18:40 Llegamos a la Plataforma, hay menos coches y la nieve está pisoteada por todos lados, ha tenido que ser un domingo bueno. Nos quitamos peso, la ropa y bajamos rumbo a Hoyos del Espino, esta vez los bocadillos kilométricos de la Bodeguillaa nos esperan.

fotos realizadas por: Juan Jose Felipe y Sergio Moyano
nota: mis fotos de las escaladas en hielo descansan en los contrafuertes del cuchillar. 

2 comentarios:

  1. Dani,
    toda la solidaridad de otro habitual perdedor de cámaras (siempre llenas con las fotos claro... faltaba más)
    Un saludo

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  2. Jejeje, Un saludo para la cantábrica que este año vais sobrados de nieve.

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